En el marco de la celebración del Día Mundial de la Alimentación, fecha proclamada por la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), Telesalud, en alianza con la Dirección Territorial de salud de Caldas, reunió a importantes actores institucionales para actualizar conocimientos y reflexionar en torno al problema del hambre en el mundo, así como en los futuros problemas que pueden derivarse de una mala gestión de los recursos agrícolas.
Para este año, el lema establecido por la FAO es: Derecho a los alimentos para una vida y un futuro mejores. En este contexto, la Red de Seguridad Alimentaria y Nutricional, realizó un evento académico en la Universidad de Caldas que aportó elementos conceptuales sobre el derecho humano a la alimentación. De igual manera, compartió experiencias exitosas y presentó el Plan departamental hacia la garantía progresiva del derecho humano a la alimentación 2023-2032.
Uno de los temas iniciales en el evento académico fue el de la disponibilidad de alimentos en cada uno de los territorios del departamento de Caldas. Dicha disponibilidad va desde el cultivo y calidad de los alimentos, hasta el embalaje, transporte y distribución en cada lugar, garantizando el suficiente contenido proteico calórico y vitamínico.
“Ya lo he dicho en varios escenarios: la salud no comienza con la prestación de los servicios en los hospitales de primer, segundo o tercer nivel de complejidad. La salud comienza en nuestras familias, con la posibilidad de asegurar el recurso suficiente para llevar el alimento a nuestras casas. Esa posibilidad también tiene que ver con que las mujeres del departamento de Caldas accedan al derecho reproductivo, tengan una atención digna durante su gestación y puedan darles a sus hijos lactancia materna exclusiva en los primeros seis meses de vida”, afirmó el subdirector de Salud Pública de la Dirección Territorial de Salud de Caldas, Jorge Rubio.
El funcionario también hizo énfasis en la urgencia de estar enterados de que muchas personas en el mundo mueren de hambre porque no tienen la capacidad para cultivar, porque ya no tienen la fuerza suficiente para hacerlo o simplemente porque ya no disponen de una tierra para cultivar. “Esto hay que tenerlo muy presente si queremos entender lo complejo de nuestra realidad alimentaria”, agregó.
A nivel mundial, la situación de hambre y desnutrición es alarmante. Según la FAO, más de mil millones de personas sufren de desnutrición, y más de 2.000 millones carecen de vitaminas y minerales esenciales en su dieta. Cada año, casi 6 millones de niños mueren por desnutrición o enfermedades relacionadas. A pesar de que muchos asocian estas muertes con crisis de hambruna o conflictos, la cruda realidad es que solo el 10% se debe a guerras o desastres naturales; el 90% es resultado de la falta de acceso crónico a alimentos adecuados.
“En Colombia, la situación es igualmente preocupante: 18,6 millones de personas presentan un consumo insuficiente de alimentos. Esto implica que muchos luchan cada día por acceder a alimentos nutritivos, como frutas y verduras, y que raramente logran obtener proteínas de calidad, como carne y lácteos. Como consecuencia, 14,6 millones de colombianos recurren a estrategias de afrontamiento, como reducir la calidad de sus comidas, saltarse comidas o pedir alimentos prestados”, explica la directora de la Fundación Nutrir, Janeth Alexandra Zuluaga Montoya.
Finalmente, la directora del ICBF regional Caldas, Sandra Milena Gaviria Ramírez, invitó a los asistentes a un trabajo articulado para fortalecer una economía local que garantice la producción de alimentos sostenibles, y una sociedad que promueva hábitos saludables para apoyar a las familias más vulnerables. “Los adultos mayores, las mujeres gestantes y los niños y niñas menores de 5 años son los principales actores en la construcción de un mundo más justo”, concluyó.
Anexo:
-Audio Subdirector de Salud Pública de la Dirección Territorial de Salud de Caldas, Jorge Rubio.
-Audio Directora de la Fundación Nutrir, Janeth Alexandra Zuluaga Montoya.
-Audio Directora del ICBF regional Caldas, Sandra Milena Gaviria Ramírez