La artista vocal y docente del Departamento de Lenguas Extranjeras de la Universidad de Caldas, María Clara Chavarriaga Rey, será la encargada de abrir el Seminario de la Federación Internacional de Músicos -FIM- y Ormúsica Internacional, que se celebrará el próximo 22 de noviembre.
María Clara también tendrá un rol destacado como moderadora del panel «La salud del músico antes y después de la pandemia», un espacio de discusión auspiciado por la FIM y Ormúsica Internacional para explorar los desafíos de salud y bienestar que enfrenta la comunidad musical.
Fundada en 1948, con sede en París, la FIM es una Federación Sindical Mundial que representa a artistas musicales en 70 países y cuenta con tres grupos regionales en Europa, África y América Latina, además de ser miembro del Consejo de Sindicatos Mundiales.
En esta entrevista, conoceremos un poco más sobre la trayectoria de esta artista vocal y los motivos que tiene la FIM para invitarla a este evento internacional.
Oficina de Prensa: ¿cómo comenzó su relación con Ormúsica Internacional y qué le motivó a trabajar en programas como “La Semana de la Voz” en Bogotá?
María Clara Chavarriaga: Conocí a Ormúsica Internacional, una organización que reúne a músicos populares en Colombia, hace varios años en Bogotá. Desde el principio, me di cuenta de la necesidad que tienen los músicos, especialmente aquellos que cantan en serenatas, mariachis y boleros, de cuidar su salud vocal. Su trabajo a menudo se da en condiciones poco higiénicas y adecuadas para la voz. Así que empecé a crear conciencia sobre la importancia de mantener hábitos saludables y logré conseguirles apoyo médico con otorrinolaringólogos en Bogotá. Así nació “La Semana de la Voz”, un programa hermoso en el que invitamos a profesionales de diferentes áreas a compartir sus conocimientos sobre el cuidado de esta valiosa herramienta.
Oficina de Prensa: ¿Cuáles son los temas y actividades que suelen abordar en “La Semana de la Voz”?
M.C.C: organizamos talleres y clases magistrales sobre el uso y cuidado de la voz. Colaboramos con fonoaudiólogos de universidades como el Rosario, la Nacional, la Pedagógica, la Manuela Beltrán y la Distrital, quienes brindan asesorías y revisiones a los músicos. También hemos abierto espacios para que se reúnan coros, cantantes, fonoaudiólogos y otros profesionales, lo que enriquece muchísimo el programa. Gracias a todo este esfuerzo, este programa se ha consolidado y ha sido un éxito en Bogotá.
Oficina de Prensa: ¿Cómo surgió la idea de crear el grupo «Diálogos Vocales» durante la pandemia?
M.C.C: La pandemia nos llevó a buscar alternativas para seguir conectados y apoyarnos. Me uní a varias universidades de Latinoamérica, y de esa colaboración nació “Diálogos Vocales”, un espacio virtual en Facebook y WhatsApp donde compartimos talleres, charlas y conciertos. Fue una manera de continuar trabajando en el cuidado de la voz y en la educación vocal, y ahora, diez años después, seguimos avanzando con el proyecto.
Oficina de Prensa: Este año, será la moderadora de un panel sobre la salud del músico en un seminario organizado por la Federación Internacional de Músicos (FIM). ¿Por qué es tan importante este tema?
M.C.C: La salud del músico es fundamental porque enfrenta desafíos únicos debido a la naturaleza repetitiva y exigente de su trabajo. Durante la pandemia, muchos músicos sufrieron de ansiedad, estrés escénico y otros problemas de salud mental, exacerbados por la incertidumbre laboral. La falta de acceso a servicios de salud también es un problema crítico. En el panel, discutiremos cómo el bienestar mental y físico afecta a los músicos, y cómo la pandemia trajo a la luz la importancia de cuidar no solo la técnica vocal, sino también la salud integral.
Oficina de Prensa: ¿Cómo cuida su propia voz y salud vocal para mantenerse en el mejor estado posible?
M.C.C: Soy muy estricta con el cuidado de mi voz. En casa, tengo un ambiente propicio para el silencio, y mi familia respeta estos espacios. No hablo en exceso y me preparo física y mentalmente para el día. Bebo mucha agua, llevo una alimentación balanceada y procuro tener una vida tranquila. Mantener estos hábitos me permite estudiar y perfeccionar las obras que interpreto, como las piezas que cantaré próximamente en Bogotá.
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